En estos días de vuelta al trabajo dejamos atrás una vida sin sujeción a horarios ni obligaciones laborales. Diversos estudios relacionados con la salud laboral manifiestan que un 30 % de los trabajadores sufren de alguna manera el llamado «síndrome postvacacional» y el resto puede manifestar un cuadro de fatiga o estrés.

El término “síndrome postvacacional” lo utilizó por primera vez, en el año 2000, Ángel Córcova del gabinete de Salud Laboral de CC.OO, y fue rápidamente recogido y propagado por los medios de comunicación.

Según la psicóloga Patricia Francisco San Julián, especialista en Neurosicología del Instituto Superior de Estudios Psicológicos “ la vuelta al trabajo se hace más cuesta arriba en sociedades en las que el trabajo se percibe como una carga que en otras donde dicho trabajo es más creativo”.

De otra parte, para Antonio Cano, presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés, este trastorno “es más bien un invento moderno de los medios de comunicación”.

Otros autores recogen que la reincorporación al trabajo tras las vacaciones lleva aparejada una situación de estrés porque hay que adaptarse nuevamente a otros horarios, actividades, responsabilidades y obligaciones.

Este síndrome, que no está recogido oficialmente como enfermedad, suele durar un espacio corto de tiempo, varios días, aunque, según algún especialista, si el mismo se prolonga durante más de 21 días se recomienda una revisión y tratamiento.